En un mundo tan tecnológico como el que vivimos actualmente es importante que los niños desconecten de lo virtual y disfruten del juego tradicional, tal y como lo hacían sus padres y sus abuelos. Desde El Taller Aserrín Aserrán consideramos que desarrollar la creatividad con juguetes de madera es muy positivo para los pequeños de la casa, ya que con estos juguetes pueden tocar, aprender y descubrir cosas nuevas de manera divertida.
En este proceso de aprendizaje lúdico los padres juegan un papel fundamental, ya que son los responsables de estimular a los niños proporcionándoles juguetes educativos que les ayuden a potenciar la imaginación y la fantasía. Es sabido que lo que mejor funciona es la imitación, de manera que si los padres presentamos una actitud creativa frente al juego contagiaremos de ilusión a los niños.
Y es que los juguetes de madera son los juguetes de toda la vida. Esos juguetes de materiales, colores y tacto agradables que no tienen pilas ni incorporan nuevas tecnologías, pero sí esconden mucho mimo detrás de su elaboración, y cuando un niño los coge entre sus manos puede trasladarse a un mundo mágico.
Despertar la curiosidad y la fantasía de los niños es una tarea diaria que podemos conseguir a través de los juguetes de madera educativos. La cuestión es que estimulen el desarrollo de cualidades creativas, siempre de manera natural, sin obligar, simplemente invitando al juego.
Los expertos aconsejan dejar a los niños jugar de manera libre, que inventen, que prueben, que creen… Todo ello les motivará, les ayudará a arriesgar, a encontrar soluciones nuevas a los problemas e incluso mejorar su autoestima. De hecho, estas habilidades les servirán para saber afrontar la vida de otra manera cuando sean más mayores y es que no debemos olvidar que están forjando su personalidad.
Los niños nacen siendo creativos, no pongamos límites a su imaginación, al revés, potenciemos su creatividad.
Hay muchos juguetes de madera para desarrollar la creatividad del niño, algunos ejemplos son:
Cocinitas de madera: a los niños les encanta jugar a ser mayores y ser cocinero es una de esas tareas diarias que nos ven hacer a los adultos en casa. Es muy positivo que puedan emplear sus manos en amasar formas creativas, descubrir nuevas texturas, probar sabores variados…
Mini mundos: despierta su curiosidad ya que al interaccionar con animales de madera quieren saber qué sonidos hacen, de dónde provienen, cómo se alimentan, etc.
Torre rosa: con este juguete de madera no sólo trabajan la motricidad fina sino que además tienen un objetivo que les ayuda a mejorar su concentración y aprenden nuevo vocabulario.
Caballitos de madera: No hace falta jugar a videojuegos para trasladarse al oeste, con los caballitos de madera balancín los más peques puedes imaginarse galopando sobre un caballo de verdad en un entorno idílico.
Camiones de madera: Inventarán infinidad de oficios, misiones y utilidades.
Desde El Taller Aserrín Aserrán ponemos el corazón en cada juguete de madera que creamos, ayudando a padres/madres y maestros/maestras a incorporar metodología Montessori/Waldorf en la educación de los pequeños a través de los juguetes de madera para el desarrollo de su creatividad.
